MEDICINA TRADICIONAL CHINA. ESCUELA NEIJING.



2013 año de la Serpiente de AGUA

蛇 水 Shé Shuĭ

Comenzo el sábado 10 de febrero
Preguntas y Respuestas, Dr Padilla, 31 de enero 2013

Es un año, desde el punto de vista del horóscopo chino, que efectivamente coincide muy bien con el sugerente título que le hemos dado a este año de “la renovación”, puesto que, como bien sabemos, los reptiles, las serpientes en este caso, suelen cambiar de decorado, de piel, y hacer “la muda” -que se llama-, se mudan… son muy limpias ellas; es un mecanismo regenerador y depurador impresionante.
Entonces, el año de la serpiente está caracterizado por la prudencia, la cautela, el cultivo del silencio, la preparación para la exactitud; también preparado para la adaptación complaciente, para la espera serena; para –en esa adaptación complaciente- la esperanza redentora.
Es el tiempo de reconocerse asentados, transitoriamente, en nuestro viaje de existencia, en lo que llamamos vida, en un lugar perdido -podríamos decir- en la infinitud del universo al que llamamos tierra. Es un, en consecuencia, un tiempo donde lo curvo se hace generoso; curvo como nuestra galaxia de espiral que se pliega sobre sí misma, para luego expandirse, o expandidamente se pliega sobre ella misma. Los curvos momentos.
Este año de serpiente también es un año de austeridad; de austeridad y, en consecuencia, de ahorro. Pero un ahorro cauteloso -como decíamos antes: la cautela además de la prudencia- y no obsesionado, no, nada obsesionado. El año de la serpiente, en genérico, podemos decir que hace honor al reino mineral, al reino vegetal, al reino animal. El año de la serpiente hace honores a todo lo creado, no desprecia, como el agua, ningún lugar, y todos le parecen buenos. En ese sentido, se conforma con muy poco. No reclama grandes beneficios sino que sabe adaptarse a las mínimas necesidades.
Bueno, ahí tenemos un montón de características que adornan al año de la serpiente y que van a ser fáciles de llevar… Los que son serpiente están en su año y los elementos que se presentan favorecen que se desarrollen esa serie de elementos: prudencia, cautela, silencio, adaptación, exactitud…
Son muy buenas condiciones para el tiempo que vive la humanidad, porque estamos en esa crisis -no solamente económica sino de todo tipo-, y recurrir a la naturaleza, recurrir a los mínimos, el conformarnos, el adaptarnos, como bien hacen las serpientes, sin perder nuestra identidad, es todo un arte. Es ir a descubrir nuestra naturaleza, con nuestras capacidades, nuestras posibilidades que, hasta ahora, no hemos desarrollado, y descubrir las capacidades y los desarrollos de los otros.
En ese sentido, es un buen año puesto que, si bien es cierto que no hay malos años ni buenos años, sí es cierto que hay determinados años que, dadas las condiciones en las que vive la humanidad, no son los más propicios, porque son años en donde el animal emblemático que lo representa, desarrollando sus capacidades, lo va a pasar mal. En cambio, en el año de la serpiente, estamos en un año de resistencia, de saberse camuflar, de pasar desapercibido, de aguardar. Por eso es una esperanza providencial.
Por eso, las personas que están bajo ese signo, pueden calmar mucho a otro tipo de serpiente, como los dragones, que les gusta volar, saltar, recrearse… Y no es tiempo para eso, no es tiempo para eso.
En consecuencia, la serpiente, en alguna medida, pone a todos, un poco en advertencia, no porque vaya a atacar, sino porque alerta de que las situaciones están al límite y de que hay que recurrir a la propia naturaleza y a la naturaleza en general, para salir adelante.
Y eso es muy importante, que recordemos, primero a nosotros mismos y a todos los demás que estamos en un año de muchas dificultades. Pero que, insisto, cuando se llega ya casi al final de un tiempo, como ahora, en este límite de crisis, se está próximo a mutar, entonces en este sentido, somos privilegiados como humanidad porque vamos a contemplar realmente, en esa renovación, un periodo de mutación.
Y la serpiente es la que avisa, en este caso, en este 2013, que hay que guardar las fuerzas necesarias para aguantar esa mutación. Porque cuando se da la época de muda, se está especialmente sensible, ¿no? Entonces es un aviso para todos los seres, para que estén atentos y alertas y respetuosos con los demás, para que todos podamos sobrevivir y desarrollar nuevas capacidades para nuevos momentos que, tanto telúricos como medioambientales, como de los últimos coletazos de crisis, pueden salpicar nuestro planeta y el comportamiento de nuestra especie. Como ya hemos visto a finales de este año con barbaries que continúan hoy en día, como las guerras por ejemplo. Pero que ya vemos que, muchas de ellas, están ya a punto de culminar porque lo bárbaro ya ha sido demasiado.
Entonces, en este aspecto, creo que el aviso de la serpiente es como un aviso muy, muy adecuado, para saberse bandear y eludir el peligro y seguir, seguir que es lo importante, hacia otras perspectivas y hacia otras dimensiones.
Así que… bienvenida sea la serpiente.

GRACIAS MAESTRO.

Año de la Serpiente … tiempo de muda de piel…grandes transformaciones.
Gracias